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El pinzado es simplemente la poda de las puntas de las tomateras. El nombre de «pellizco» proviene del hecho de que los brotes y las ramas secundarias de la planta son bastante blandos y lignificados. Si se poda con dos dedos, las uñas del pulgar y del índice son suficientes para cortar los tallos. Descubra aquí lo importante que es pellizcar los tomates.
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¿Por qué picar los tomates?
En resumen, pellizcar los tomates acelera la maduración del fruto para permitir una mejor cosecha.
Los tomates tienen un ritmo de crecimiento especialmente rápido, lo que hace pensar que la cosecha será abundante. Sin embargo, los tallos secundarios sobrecargan las tomateras, lo que puede agotarlas rápidamente. Además, estas ramas no sirven para nada e impiden que el sol llegue a los tomates, que ya están casi desarrollados. Además, sólo los frutos que ya están madurando serán aptos para la cosecha. Las flores que acaban de ser polinizadas no tendrán tiempo de madurar. Al reducir el número de flores, aumenta su tamaño y favorece la maduración de los frutos ya establecidos. Así cosechará tomates vigorosos, maduros y más sabrosos.
¿Cómo se pellizcan los tomates?
El principio es conservar sólo el tallo principal de la planta.
Para ello, primero hay que identificar los chupones o los tallos secundarios. Suelen encontrarse en las axilas del tallo principal y de una hoja. Pellizque estas ramas con un golpe seco de la punta de los dedos. No deje ninguna flor nueva en la planta, ya que no tendrá tiempo de madurar. Retire también los extremos de los tomates que tocan el suelo para evitar el ataque de los hongos. Esto también es para evitar que la presencia de frutos grandes colapse la planta bajo su peso. Si es necesario, lo mejor es volver a sujetar la planta a su soporte. Acortar toda la planta para ayudarla a dar prioridad a la maduración de los frutos.
Agosto: el mejor momento para podar tomates
Aunque tus tomateras no muestren ninguna anomalía, debes podarlas. Y no hay mejor momento que el mes de agosto para hacer el pellizco. Al fin y al cabo, en unas semanas las condiciones meteorológicas ya no serán suficientes para que maduren las flores polinizadas. Pronto el calor y el sol se irán. Los tomates no crecen a temperaturas inferiores a 10 °C. Además, desde la floración hasta la maduración, el tomate necesitará 2 meses. Por lo tanto, ¡ya es hora de empezar a podar los tomates!