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Con su incomparable sabor y aroma, la albahaca es una hierba de bajo crecimiento muy utilizada en la cocina. Además de las especies ornamentales que se pueden cultivar en casa, también es posible plantar variedades para la preparación de alimentos o recetas de remedios naturales. Aunque esta especie de planta es bastante ramificada, es necesario aplicar ciertos métodos para hacer más cosechas. Para mantener sus propias existencias en todo momento, consulte estos prácticos consejos.
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Cultivo de semillas de albahaca
Para obtener una cosecha abundante y consistente de albahaca para aromatizar tus platos o para librarte de los insectos, lo mejor es cultivar albahaca a partir de semillas. Para ello, es conveniente sembrarlas individualmente en el suelo a una distancia razonable entre ellas. A continuación, debes cubrir las semillas con una fina capa de tierra de aproximadamente un milímetro para que puedan penetrar en el suelo mientras crecen. Cuando la nueva albahaca tenga al menos 6 hojas, puedes trasplantarla a un lugar designado.
Elección de la ubicación y uso del sustrato
Para cultivar la albahaca con eficacia, lo mejor es colocarla en un lugar estratégico donde pueda beneficiarse realmente de los rayos del sol. A la albahaca le encanta el sol, pero es importante saber que no soporta el calor directo del mediodía. Por otro lado, esta planta aromática puede marchitarse a la sombra. Por lo tanto, es esencial encontrar el lugar adecuado para cultivarlo.
El uso de sustrato también es esencial para el correcto desarrollo de su cultivo de albahaca. El sustrato más adecuado es una marga arenosa permeable, que puede airearse con una parte de perlita.
Regar bien la albahaca
Para que crezca bien, tu cultivo de albahaca debe estar bien regado. La superficie del sustrato debe permanecer siempre húmeda. Sin embargo, hay que evitar mojar demasiado el sustrato, ya que esto puede provocar la putrefacción de las raíces. Tenga en cuenta que la falta o el exceso de agua puede manifestarse rápidamente en la planta. En general, cuando hay falta de agua, las hojas se doblan. Si hay demasiada agua, pueden aparecer manchas negras o moho.
Picar la albahaca
Para garantizar una cosecha constante de albahaca, es esencial pellizcar las hojas con regularidad. El mejor momento para pinchar es cuando la planta empieza a mostrar la cuarta capa de hojas. Esto debe hacerse 1 cm por encima de la yema. Esto permitirá que su planta se ramifique y multiplique sus hojas.
Toma de esquejes
Para multiplicar la cosecha de albahaca y optimizar su suministro de hierbas, puede tomar esquejes de la planta madre de albahaca. Colócalas en agua durante unos días para que echen raíces. Una vez que aparezcan las raíces, puedes plantarlas en un sustrato. A título informativo, la época ideal para realizar los esquejes es entre julio y agosto.
